La tortuga: una mascota perfecta
Lo primero que debemos de tomar en cuenta es que el hogar de la tortuga cuente con buen espacio para que pueda nadar, también zonas donde pueda salir del agua, una zona que esté seca, las tortugas no siempre tienen que estar en el agua, además hay que adquirir un filtro, una luz adecuada y un calefactor que regule la temperatura del agua, esto dependerá del tamaño del habitad y de la cantidad de tortugas.
Las tortugas son animales carnívoros, pero con su evolución también han incorporado las plantas a su dieta, aunque en todas las tiendas de mascotas venden alimento proceso especial para tortugas, dependiendo del tamaño y la especie, se les puede dar lombrices, pedacitos de pescado y babosas.
Existen dos tipos de tortugas, las de agua y las de tierra, normalmente las que se tiene en los hogares es a la tortuga de agua, que puede vivir en una acuario con islas, y la de tierra si necesita un lugar amplio donde pueda moverse y explorar, por lo general estas tortugas llegan a crecer más porque se desarrollan en lugares más amplios.
Tener una tortuga de mascota es todo un compromiso, son animalitos lentos y muy tiernos, siempre al comprar una tortuga es indispensable preguntar qué tipo de tortuga es y cuál es la alimentación adecuada, aunque esta mascota no tenga comunicación directa con su dueño, se tiene que tomar con responsabilidad el mantener limpio su hogar, darle de comer tres veces al día, y estar pendientes de su piel y caparazón.
Tienen un tronco ancho y corto. Por detrás tienen las patas posteriores y la cola, su caparazón formado por placas óseas revestidas de placas córneas, la columna vertebral está soldada a la parte dorsal del caparazón, no tiene dientes, pero cuenta con una mandíbula afilada y pueden llegar a vivir hasta 150 años o más, según la especie.
Hay tortugas de habitad terrestre y acuático, en mares y agua dulce. Algunas pueden estar en ambos y pasar parte de su tiempo en tierra y agua dulce. Cuando son de tierra tienen dedos, y si son de agua, sus extremidades se transforman en aletas o, en dedos unidos por membranas.
Las tortugas pueden comer diversos alimentos, sin embargo, los ideales para que lleven una vida saludable, son el consumo de hortalizas, frutas y verduras. El tomate, calabacín, melocotón, patilla, piña, ciruela, entre otros, la ayudan mucho en su crecimiento y desarrollo.