Como cuidar a tu perro después de vomitar
Es común que los perros vomiten de vez en cuando por diversos motivos, cuya gravedad puede variar de leve a considerable. Por ejemplo, es probable que tu perro adore buscar comida y vomitar como una manera de deshacerse de la comida estropeada en su estómago.
Luego de que tu perro haya vomitado, tranquilízalo indicándole que no ha hecho nada malo. Intenta recostarlo y hacer que descanse. Si parece estar frío o si tiembla, cúbrelo con una manta y bríndale mucha atención y deja que tu perro se calme. Bríndale tu ayuda para que se ponga cómodo en el piso, así no tendrá que tratar de levantarse y caminar.
El pelo de tu perro puede enmarañarse a causa del vómito seco; por ello, es una buena idea limpiarlo. Solo hazlo cuando tu perro ya haya reposado por un momento, y deja de limpiarlo si el baño lo estresa. Es probable que debas colocar almohadillas para cachorros o toallas viejas debajo de su mentón y alrededor de él, así no manchará la alfombra si vuelve a sentir ganas de vomitar.
Vigila de manera minuciosa a tu perro luego que haya vomitado, ya que, si vuelve a vomitar, requerirá atención médica. Entre los signos de que podría volver a vomitar tenemos a los esfuerzos por vomitar, o un ruido que se parece al producido cuando se tiene algo atorado en la garganta; una postura rígida; y deambular sin rumbo.
Luego de que tu perro haya vomitado, es probable que sienta náuseas, lo que hará que no desee beber agua. Esto y la pérdida de líquido al vomitar pueden generar deshidratación, si la cantidad de líquido que pierde es mayor a la que ingiere. Si tu perro muestra signos tempranos de deshidratación, bríndale una bebida con electrolitos mezclada con agua en intervalos de algunas horas durante un día.
Analiza los elementos recientes como la dieta de tu perro, su comportamiento, sus emociones y las condiciones ambientales. Esto te permitirá identificar cuál podría ser la razón por la que vomita. Por ejemplo, ten en cuenta los paseos recientes y si tu perro podría haberse comido un animal muerto o comida desechada.