Si bien todos queremos estar lo más cerca posible de nuestro perro hay ocasiones en las que debemos separar los espacios y aquí juega un rol fundamental la casa de tu perro.

 

No se trata de un accesorio más, la casa tiene un rol clave a la hora de proteger a nuestra mascota de las altas y bajas temperaturas. Por lo general son usadas en jardines y terrazas, sin embargo, existen algunas adaptadas para usarlas al interior del hogar.

 

Las más comunes en nuestro país son de plástico y de madera. En el primer caso debes tener la precaución de instalarla en un lugar donde le llegue sombra tanto en invierno como en verano, ya que tienden a calentarse y a veces le resulta difícil soportar el calor a tu perro.

 

Las de madera en cambio tienen menos restricciones a la hora de instalar ya que al ser de madera son más aislantes y protegen mejor a tu mascota frente a las temperaturas extremas.

 

 

También es importante considerar que la casa de tu perro debe contar con todos los accesorios para que sea un lugar agradable para él, por ejemplo, una cama y mantas. Además, puedes incluir algunos juguetes para que se entretengan al interior de su casa.

 

Sea cual sea la casa que elijas para tu perro debes asearla periódicamente y desinfectarla en otoño e invierno cada 2 meses y en primavera y verano 1 vez al mes, esto es para evitar la acumulación de parásitos, ya que aquí se esconde una enorme cantidad de pulgas, garrapatas y ácaros.