La esterilización de un conejo es muy positiva para el animal y su salud, siempre que no existan contraindicaciones determinadas por el veterinario.

 

En el periodo de celo, los machos comienzan a marcar territorio orinando ciertos lugares de la casa. Al esterilizar esa conducta se ve considerablemente reducida.

 

En el caso de las hembras, al no estar esterilizadas tienden a sufrir trastornos del comportamiento y se ponen más nerviosas en comparación a una coneja estéril. Incluso aquellas que han tenido crías pueden presentar conductas agresivas con el fin de proteger su nido.

 

Otro de los beneficios que presenta en el caso de las hembras es que la esterilización ayuda a prevenir el cáncer mamario, de útero y otros problemas complejos que pueden afectar su sistema reproductor.

 

 

Un conejo esterilizado, ya sea macho o hembra, será más sociable y podrá convivir con otros conejos u otros animales de una forma más amistosa. Será un poco menos activo, más sano, además de interactuar mejor con las personas.

 

Además de estos beneficios, un conejo esterilizado aumentará significativamente su expectativa de vida. Un conejo no esterilizado, macho y hembra, tiene un promedio de vida de 6 años. En tanto, uno estéril puede vivir hasta 10 años.

 

Se recomienda esterilizar al conejo a una edad temprana y debes recurrir a tu médico veterinario para que de las indicaciones necesarias para este proceso.