Sigue disfrutando la piscina con tu mascota, pero considera estos consejos
Es recomendable que no beban agua de la piscina ya que, al contener cloro al igual que los humanos pueden ver afectado su sistema digestivo, llegando a sufrir problemas como vómitos o diarrea.
Si tu perro es cachorro y su estado de salud no está al 100% es mejor no exponerlo a los peligros de la piscina. Si tiene problemas en su piel, alguna enfermedad intestinal o cualquier otra complicación, es mejor evitar el contacto con el agua.
En tercer lugar, debes tener en cuenta que no todos los perritos pueden disfrutar de la piscina. Razas como los braquicéfalos o las que tienen patas más cortitas pueden tener problemas para nadar en una piscina, cualquiera sea su profundidad. Algunas de ellas son los Basset Hound, Daschhund, Shih Tzu, Bulldog americano, francés e inglés, Pug, Bull Terrier y Pequinés entre otros.