Es necesario evitar golpes de calor en nuestras mascotas, por lo tanto jamás debemos dejar al perro o gato encerrado en el auto, ni siquiera por 5 minutos. Tampoco es bueno dejarlos en una habitación o ambiente donde no tengan aire libre.

 

Por nada del mundo podemos amarrarlos en un sitio que no tenga sombra, ya que no sólo se deshidratarán, sino que también sufrirán heridas y/o quemaduras por el sol.

 

Debemos proporcionarles mucho agua, sin importar que no la consuman en su totalidad. Cámbiala todos los días! Es fundamental que esté limpia y fresca.

 

 

En las horas más calurosas un baño refrescante, lo agradecerá. Si estás de vacaciones, puedes dejar que tu perro se moje a orilllas del lago, río mar, o siempre está la opción de manguerearlo.

 

Ten cuidado con sus patitas! El cemento, la arena y las piedras se calientan mucho en verano y las almohadillas de nuestras mascotas están expuestas. Trata de evitar las horas de mayor calor para dar un paseo.