Conejo Californiano
Los conejos californianos son una de las razas más populares del mundo, los conejos californianos fueron criados en California, como su nombre indica, y son el resultado del cruce entre conejos himalayos y chinchilla. Estos genes le dieron al conejo californiano una excelente capa de pelo, que era precisamente el objetivo que se perseguía con su cría.
Los conejos californianos son bastante musculosos y corpulentos, llegan a pesar alrededor de 4 kg en su edad adulta. Su pelaje es muy denso y grueso y consta de dos capas. La base del pelaje es blanca, pero tiene puntos oscuros, casi negros en las orejas, nariz, pies y cola.
El conejo californiano es estupendo como mascota: es cariñoso, tranquilo, muy amistoso y dulce. A veces pueden ser algo tímidos y reservados, pero por lo general los californianos no tienen dificultad para adaptarse a la vida de mascota.
Los conejos en general son mascotas delicadas. Son propensos a los resfriados y otras enfermedades respiratorias, por lo que siempre debes mantener alejado a tu conejo de corrientes de aire; tampoco es recomendable que su jaula esté en un lugar demasiado caluroso. Busca el emplazamiento ideal de su hogar en un lugar de temperatura agradable y moderada.
Los conejos californianos necesitan una jaula amplia en la que poder moverse con libertad y comodidad. Si te lo puedes permitir, ten una pareja, ¡son muy sociables! Lo mejor son dos machos o bien una hembra y un macho castrado.
Por lo general, los conejos californianos son bastante saludables. Pero por supuesto pueden tener problemas, igual que cualquier otro. Es importante asegurarse de que desgasta bien sus dientes para que no le crezcan en exceso.
El Californiano tiene orejas de talla moderada, pesa entre 3,5 y 4,75 kg. El color original de esta raza era muy similar al del Himalayo. Tiene un cuerpo blanco y negro en pies, nariz, orejas y cola. El Californiano se encuentra hoy en chocolate, azul y lila, todos desarrollados en Gran Bretaña.