Existen multitud de mitos sobre bañar a los perros, unos más acertados que otros. Se dice que al bañarlos pierden los aceites naturales de su piel y daña el pH, por ejemplo. Esto no es del todo cierto, ya que solo puede afectar a su salud si los lavamos en exceso o si no los lavamos nunca. Los perros se ensucian y necesitan que los bañemos cada cierto tiempo precisamente para conservar su salud.

Cuando tenemos una mascota, y específicamente un perro, siempre nos preguntamos cada cuanto hay que bañarlo y cortarle el pelo, todo esto varía dependiendo del tipo de pelo del perro y también de la edad, ya que es diferente cuando el perro es adulto a cuando es un pequeño cachorro, muy importante es estar atento a las necesidades de la mascota y ante todo la higiene.

Para evitar que nuestro perro huela mal y se mantenga limpio más tiempo es importante cepillarlo frecuentemente. Es preferible cepillarlo durante unos pocos minutos cada día que una sola vez al mes durante una hora. Al cepillarlo eliminarás el pelo muerto y el polvo y conseguirás que tu perro se mantenga limpio por más tiempo. Aunque, por supuesto, el cepillado no sustituye al baño.

 

Los cachorros son muy delicados, es casi que igual que manipular un bebé humano, si el cachorro todavía esta con la madre tenemos que esperar el destete, tenemos que esperar el proceso normal, para que la perra reconozca por el olor a todas sus crías, este proceso es sumamente importante y no debemos intervenir.

Si su cachorro está muy sucio o huele mal otra opción es limpiarlo con toallitas húmedas, en las zonas específicas donde este sucio el cachorro, otra forma es humedecer una esponja, ponerla en las partes del perro donde este sucio y esto absorberá, es importantes después de estas dos opciones secarlos, ya sea con un paño o con una secadora de cabello.

Cuando se va a bañar al perro por primera vez, debemos quitarle el miedo al agua, también debemos procurar que el agua esté tibia, no fría, debemos mojarlo con ayuda de una esponja y con las manos poco a poco, limpiar todas las partes del cuerpo, y muy importante para que no se resfríe debemos secarlo, con un paño o una secadora, ponerla a un nivel bajo, para no lastimarle la piel.

La frecuencia del baño es muy diferente entre los perros de pelo corto y los de pelo largo. Estos últimos necesitan más cuidados y hay que estar más pendiente de su imagen, es normal, tienen más pelo donde se puede esconder el polvo y la suciedad.