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Cuando te das cuenta que sos madre o padre sobreprotector de tu mascota

Muchas personas deciden no tener hijos y otras parejas no pueden, hoy en día la opción de tener una mascota y llenar esa atención es muy común, sin embargo, debemos tener muy en cuenta que jamás será igual, si bien es cierto una mascota requiere muchos cuidados, como un hijo, no debemos excedernos, hoy te vamos decir cuáles son esas señales de que sos un padre o madre sobreprotectora con tus mascotas.

Cuando no puedes salir de vacaciones sin tu mascota, las vacaciones son todo un estrés cuando somos madres o padres sobreprotectores, porque imposible salir sin nuestras mascotas. Muchas personas se llevan a su mascota a la playa o montaña, pero si tienen algún tour o tienen que ir a un lugar donde no se pueden llevar a su mascota pasan incómodos y preocupados, esto no debería de suceder.

Otra señal es cuando gastas más dinero en tu mascota que en vos mismo, muchas personas tienen una obsesión, y pasan comprando todo tipo de accesorios, juguetes, ropa, y muchas veces lujos innecesarios, cuando no regulas el gasto en tu mascota y se vuelve incontrolable, es cuando nos damos cuenta que tenemos un problema.

Uno de los síntomas más comunes es cuando tienes que ir al trabajo o la universidad, y lo primero que se te viene a la mente del mismo modo que sucedería si tuviéramos hijos, cuando salimos y dejamos solas a nuestras mascotas se nos pasan mil tragedias por la mente. ¿Y si se escapa? ¿Y si la atropellan? ¿Si pasa algo en la casa y no tiene como escapar? ¿Si tiene hambre, sed o piensa que la abandoné? El pensar solo cosas negativas y de tragedia nos indica que estamos mal.

Otro aspecto muy común es cuando dormimos con nuestras mascotas, eso no tienen nada de malo, el problema es cuando en las mañanas no queremos levantarnos par ano despertar a nuestro perro o gato, al verlos dormidos y envueltos entra las sabanas, cuando no te podes levantar y hasta se te hace tarde por no molestar a tus mascotas en su dulce sueño, es cuando tenemos que detectar que estamos mal, y eso no debería de suceder.