Los perros también pueden sufrir depresión
La depresión en los animales puede darse cuando se intentan adaptar a un nuevo ambiente y no lo logran, cuando son sometidos a violentos adiestramientos o con constantes castigos, cuando pasan un tiempo prolongado en soledad y encierro o son abandonados.
Existen varias etapas antes de llegar a la depresión y se da desde el aburrimiento, ansiedad y falta de interés. Es posible detectar la depresión por la falta de apetito en el perro o gato, bajo de peso, falta de atención al mundo exterior y comportamientos extraños.
Si tu mascota presenta alguno de estos síntomas o ha sido sometido a alguna de las situaciones antes mencionadas y crees que puede estar afectada, recurre a un veterinario.